El final nunca es feliz, pues no es final.
Las flores se marchitan, la pasión perece;
el drama crece y al romance inhabilita.
La música cesa, el vino seca;
las miradas ya no fijan, a penas cruzan.
Las sonrisas no enternecen, los toques no electrifican;
al amor lo sacrifican pequeñeces.
El final no es feliz, pues cuando la novela acaba,
comienza la vida
y en la vida, la felicidad se paga con creces.
El final nunca es feliz, pues no es final.
La felicidad no es completa, pues no es real.
Lo único real es el camino, la agridulce jornada.
Los juegos, las trastadas que tendemos a hacernos
forjan el único infierno que podemos esperar.
La rueda gira y al final
de cada otoño hay invierno.
By tuttysan © 2013
Final Feliz – poema.